Para este nuevo artículo regresare al mundo del dibujo animado japonés, y hablare de una película que, para poder verla en su día, no tuve mas remedio que recurrir a una "copia de seguridad" de esas que corren
por Internet, que una persona amable se había tomado la molestia de
subtitular en castellano. La
chica que saltaba a través del tiempo, (時をかける少女 Toki o Kakeru Shōjo) de Mamoru Hosoda. Comedia romántica en clave de ciencia ficción. Una película que, a pesar de ganar el premio de la categoría de animación en el prestigioso Festival de Cine Fantástico de Sitges en el 2006, no fue estrenada en la gran pantalla en nuestro país, y hubo que esperar hasta 2010 para poder conseguirla de forma "legal", cuando se estreno directamente en DVD. Luego andarán quejandose de que la gente se baje las cosas de Internet... si es que lo van pidiendo a gritos.
¿De que va la película? Bueno, supongo que, quien mas, quien menos, todos hemos tenido alguna vez un día de esos que se dicen "de mierda", en que desearíamos poder volver al momento en que nos levantamos de la cama, borrando de la historia todas las cagadas cometidas durante la jornada. ¡Ah, si tuvieramos una maquina del tiempo! Claro que, eso tiene sus inconvenientes. Imagino que todos los habituales de este blog hemos visto muchas películas, así que no les sera difícil ubicar la escena que acompaña a esta canción. Sobre todo después de haber hablado de maquinas del tiempo. Vayan meditando sobre ello, aunque se trate de la música de otra película, mientras yo les preparo el resumen de esta.
La protagonista de la película es Makoto, una estudiante de secundaria que no llama especialmente la atención, una adolescente como tantas otras, que comienza la película teniendo un día negro de esos que comentaba al principio, en que todo te sale mal. Un día que parece que va a culminar tragicamente cuando los frenos de su bicicleta se rompen mientras baja una pendiente, al final de la cual hay un paso a nivel por el cual esta a punto de cruzar un tren. Pero cuando parece que el choque es inevitable, el tiempo se congela, y a continuación Makoto es devuelta a la situación que ocupaba hace unos segundos, justo antes de tomar la pendiente, quedando estupefacta al darse cuenta de que ha hecho algo imposible, retroceder en el tiempo. Desorientada, acude a charlar con una tía suya, que trabaja de conservadora en un museo, la cual, para pasmo de Makoto, y de paso, también del espectador, no le da mayor importancia a su experiencia, reduciendo un hecho que desafía todas las leyes de la física a poco mas que una molestia de la adolescencia. Algo como el acné, que, bueno, paciencia chica, ya pasará. Claro que tiene un buen motivo para ello: a ella también le pasó cuando tenía la edad de Makoto. Este es un punto que, a mi entender, no termina de encajar demasiado bien con el final de la película, pero tampoco es cuestión de pasarse ahora con los spoilers explicando por que digo esto.
En fin, el caso es que Makoto se hace a la idea de que tiene el poder de hacer volver el tiempo atrás. Tras unos cuantos ensayos bastante cómicos, finalmente le encuentra el truco a su recién descubierta habilidad, y se decide a sacarle provecho. Al principio el tono es jocoso, algo parecido a la forma de actuar de Bill Murray también al principio de El Día de la Marmota (para los que antes no lo recordasen, es la película en la que sonaba la canción de Cher que puse arriba en la radio cada vez el protagonista regresaba al pasado). Pero de pronto a Makoto le da por tratar de arreglar las vidas sentimentales de sus amigos, y es ahí cuando empiezan sus quebraderos de cabeza, incapaz de controlar todas las ramificaciones inesperadas de cada una de sus elecciones. En fin, ya sabéis, para meditar sobre eso que decían en Spiderman, lo de que un gran poder conlleva una gran responsabilidad y todo eso.
La película esta inspirada de forma bastante difusa en la novela del mismo titulo de Yasutaka Tsutsui (no esta traducida al español, aunque si al ingles), publicada por entregas en 1967. De hecho, la historia de la película se trataría de una continuación de la que cuenta la novela, cuya protagonista es la tía de Makoto, que aparece como personaje secundario en la película, precísamente la misma que no se sorprende de que su sobrina pueda viajar en el tiempo.
En resumen, La Chica que Saltaba en el Tiempo es una película amable, entretenida de ver, y aunque el tema de saltos atrás y adelante en el tiempo obliga a estar atento al desarrollo, mas que nada para identificar a que escena anterior hemos retrocedido, la verdad es que no te pierdes, cosa que en películas con este tipo de argumentos a veces es difícil de evitar. Película para ver comiendo palomitas, suspirar pensando "ay, si yo pudiera hacer eso", darse cuenta que es mejor que no y apagar el vídeo, eso si, con la satisfacción de haber visto una buena película. Que ya es algo.
¿De que va la película? Bueno, supongo que, quien mas, quien menos, todos hemos tenido alguna vez un día de esos que se dicen "de mierda", en que desearíamos poder volver al momento en que nos levantamos de la cama, borrando de la historia todas las cagadas cometidas durante la jornada. ¡Ah, si tuvieramos una maquina del tiempo! Claro que, eso tiene sus inconvenientes. Imagino que todos los habituales de este blog hemos visto muchas películas, así que no les sera difícil ubicar la escena que acompaña a esta canción. Sobre todo después de haber hablado de maquinas del tiempo. Vayan meditando sobre ello, aunque se trate de la música de otra película, mientras yo les preparo el resumen de esta.
A continuación se desvelan detalles de la trama.
La protagonista de la película es Makoto, una estudiante de secundaria que no llama especialmente la atención, una adolescente como tantas otras, que comienza la película teniendo un día negro de esos que comentaba al principio, en que todo te sale mal. Un día que parece que va a culminar tragicamente cuando los frenos de su bicicleta se rompen mientras baja una pendiente, al final de la cual hay un paso a nivel por el cual esta a punto de cruzar un tren. Pero cuando parece que el choque es inevitable, el tiempo se congela, y a continuación Makoto es devuelta a la situación que ocupaba hace unos segundos, justo antes de tomar la pendiente, quedando estupefacta al darse cuenta de que ha hecho algo imposible, retroceder en el tiempo. Desorientada, acude a charlar con una tía suya, que trabaja de conservadora en un museo, la cual, para pasmo de Makoto, y de paso, también del espectador, no le da mayor importancia a su experiencia, reduciendo un hecho que desafía todas las leyes de la física a poco mas que una molestia de la adolescencia. Algo como el acné, que, bueno, paciencia chica, ya pasará. Claro que tiene un buen motivo para ello: a ella también le pasó cuando tenía la edad de Makoto. Este es un punto que, a mi entender, no termina de encajar demasiado bien con el final de la película, pero tampoco es cuestión de pasarse ahora con los spoilers explicando por que digo esto.
En fin, el caso es que Makoto se hace a la idea de que tiene el poder de hacer volver el tiempo atrás. Tras unos cuantos ensayos bastante cómicos, finalmente le encuentra el truco a su recién descubierta habilidad, y se decide a sacarle provecho. Al principio el tono es jocoso, algo parecido a la forma de actuar de Bill Murray también al principio de El Día de la Marmota (para los que antes no lo recordasen, es la película en la que sonaba la canción de Cher que puse arriba en la radio cada vez el protagonista regresaba al pasado). Pero de pronto a Makoto le da por tratar de arreglar las vidas sentimentales de sus amigos, y es ahí cuando empiezan sus quebraderos de cabeza, incapaz de controlar todas las ramificaciones inesperadas de cada una de sus elecciones. En fin, ya sabéis, para meditar sobre eso que decían en Spiderman, lo de que un gran poder conlleva una gran responsabilidad y todo eso.
Fin de la zona de peligro de spoilers
La película esta inspirada de forma bastante difusa en la novela del mismo titulo de Yasutaka Tsutsui (no esta traducida al español, aunque si al ingles), publicada por entregas en 1967. De hecho, la historia de la película se trataría de una continuación de la que cuenta la novela, cuya protagonista es la tía de Makoto, que aparece como personaje secundario en la película, precísamente la misma que no se sorprende de que su sobrina pueda viajar en el tiempo.
En resumen, La Chica que Saltaba en el Tiempo es una película amable, entretenida de ver, y aunque el tema de saltos atrás y adelante en el tiempo obliga a estar atento al desarrollo, mas que nada para identificar a que escena anterior hemos retrocedido, la verdad es que no te pierdes, cosa que en películas con este tipo de argumentos a veces es difícil de evitar. Película para ver comiendo palomitas, suspirar pensando "ay, si yo pudiera hacer eso", darse cuenta que es mejor que no y apagar el vídeo, eso si, con la satisfacción de haber visto una buena película. Que ya es algo.
Ponte las pilas, coño! ¡Queremos más!
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